En un movimiento sin precedentes, el presidente Javier Milei ha decidido trasladar la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso de la Nación a las 21 horas del próximo viernes. Este cambio, formalizado mediante el decreto 197/2024, busca asegurar que «todos los ciudadanos puedan escucharlo», rompiendo con la tradición de realizar la Asamblea Legislativa en horas de la mañana. La modificación apunta a maximizar la audiencia televisiva, en un contexto donde Milei ha mantenido tensiones con legisladores y gobernadores por diversos temas, incluida la frustrada votación de la ley ómnibus.
El presidente, conocido por sus enérgicas críticas al Congreso y a sus miembros, prepara un discurso que se anticipa de fuerte impacto, en medio de un ambiente de extrema tensión política. Las declaraciones de Milei, quien recientemente regresó de Estados Unidos, se mantienen en reserva, pero se espera que aborden las reformas planteadas por su administración, incluyendo el controversial cierre del INADI y propuestas legislativas para restringir la emisión monetaria por parte del Banco Central.
La asamblea del 1° de marzo promete ser un escenario de manifestaciones políticas, donde las reacciones de los legisladores al discurso del presidente serán tan significativas como las palabras del mandatario mismo. A pesar de estar en minoría en el Congreso, la alianza de Milei con Pro podría fortalecer su posición, aunque aún no se ha confirmado la formación de un interbloque.
En preparación para este evento histórico, Milei ha solicitado que la vicepresidenta Victoria Villarruel incluya a José Luis Espert, aliado clave en la discusión de la ley ómnibus, en el grupo de bienvenida a su llegada al Congreso. Este gesto subraya la importancia de Espert en la defensa pública de la gestión de Milei y en la articulación de futuras estrategias legislativas.