La interna de Pro se agudiza a raíz de la postura de Patricia Bullrich, quien mediante un comunicado expresó un apoyo incondicional al presidente Javier Milei en su conflicto con Chubut, provocando malestar dentro del bloque que lideró Mauricio Macri. Este desacuerdo pospuso indefinidamente una reunión clave entre legisladores nacionales de Pro y gobernadores afines, incluyendo al chubutense Ignacio Torres, quien se encuentra en el centro de la disputa por la retención de $13.500 millones de coparticipación por parte del gobierno nacional.
Bullrich, actual ministra de Seguridad y vista como una virtual lugarteniente de Milei, criticó duramente a Torres por amenazar con cortar el suministro de gas y petróleo tras el recorte de fondos federales. Además, lanzó un velado reproche al expresidente Macri por lo que consideró una gestión demasiado prudente durante su mandato, contrastándola con la necesidad de medidas más drásticas para alcanzar el equilibrio fiscal.
La posición de Bullrich, respaldada por un grupo de legisladores leales, no fue acompañada por la mayoría de los miembros de Pro, incluidos figuras prominentes como Cristian Ritondo, Diego Santilli y María Eugenia Vidal. Desde el entorno de Macri, se enfatiza la búsqueda de soluciones responsables y consensuadas para los conflictos fiscales, subrayando la importancia de la colaboración entre la Nación y las provincias, así como el rol del Congreso.
Este episodio no solo revela las crecientes tensiones internas dentro de Pro, sino que también complica las perspectivas de una alianza estratégica entre La Libertad Avanza y Pro en el Congreso, alentada por Bullrich pero frenada por Macri ante el riesgo de una posible fractura en el partido.