En las elecciones generales de España, el Partido Popular (PP) ha ganado, pero su líder Alberto Núñez-Feijóo no ha logrado obtener la mayoría necesaria para formar Gobierno. A pesar de obtener 136 diputados, los 33 escaños de Vox no son suficientes para alcanzar la mayoría absoluta de 176. Este resultado sorprendente pone en un aprieto al líder del PP, ya que no ha logrado alcanzar las expectativas esperadas y ahora enfrenta un difícil panorama político.
La aritmética parlamentaria actual abre la posibilidad para que Pedro Sánchez, líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), pueda reeditar un Gobierno de coalición progresista. Para esto, necesitaría el apoyo de los partidos nacionalistas catalanes, vascos y gallegos en una hipotética investidura. Aunque el PSOE aguanta en las elecciones con 122 diputados (un aumento respecto a las elecciones de 2019), su investidura dependería de los votos del partido de Carles Puigdemont debido al retroceso que ha sufrido Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que ha perdido 6 escaños.
Feijóo, a pesar de lograr una importante subida en escaños (pasando de 89 a 136), no cuenta con suficientes apoyos para formar un Gobierno estable. La polarización política en los últimos meses ha dificultado la suma de otros partidos más allá de Vox. La única posibilidad para Feijóo sería convencer a los socialistas para permitir gobernar a la lista más votada, una tarea que se antoja casi imposible.
Por otro lado, Yolanda Díaz, líder de la coalición Sumar, ha salvado los muebles en estas elecciones, aunque su formación se sitúa como la cuarta fuerza política del país, detrás de Vox. Sumar ha conseguido 31 escaños, formando una amalgama de formaciones que en 2019 sumaron 38 diputados, pero ahora solo han conseguido 31. Los resultados reflejan un escenario de bloques políticos que pueden desembocar en un bloqueo en la gobernabilidad del país, lo que podría llevar a la repetición electoral como una opción posible.
Es importante destacar que en Cataluña, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Junts empatan a siete diputados cada uno, mientras que desaparece la Candidatura d’Unitat Popular (CUP). La derrota de ERC ha sido significativa, perdiendo seis escaños, mientras que Junts ha ganado uno. En el País Vasco, la coalición Bildu supera al Partido Nacionalista Vasco (PNV), y la formación Teruel Existe, que representa la España Vaciada, también sale fuera del Congreso. Por otro lado, logran representación el Bloque Nacionalista Galego (BNG), Unión del Pueblo Navarro (UPN) y Coalición Canaria (CC).
En conclusión, los resultados electorales han dejado un panorama incierto en la gobernabilidad de España, con opciones abiertas para la formación de Gobierno y la posibilidad de repetir elecciones si no se alcanzan acuerdos políticos para conseguir una mayoría parlamentaria sólida. Los próximos días serán cruciales para determinar el rumbo político del país.