La tormenta Doksuri, que había llegado a ser catalogada como supertifón, barrió el territorio chino de sur a norte después de causar estragos en Filipinas la semana pasada
Las lluvias letales que azotaron Beijing en los últimos días fueron las más intensas en 140 años, desde el inicio de los registros de las precipitaciones, así lo indicó este miércoles el servicio meteorológico de la capital china.
“El valor máximo de precipitación registrado” por una estación de la ciudad durante esta tormenta “fue de 744,8 milímetros” y se trata de “la más intensa en 140 años”, indicó.
El récord anterior había sido de 609 milímetros en 1891, afirmó este organismo.
La tormenta Doksuri, que había llegado a ser catalogada como supertifón, barrió el territorio chino de sur a norte después de causar estragos en Filipinas la semana pasada.
La capital china y sus alrededores, habitualmente secos, recibieron fuertes lluvias desde el sábado, acumulando casi la media mensual de precipitaciones para el mes de julio en apenas 40 horas.
El martes, la televisión estatal CCTV dijo que la tormenta había provocado al menos 11 muertos en Beijing, donde había 13 desaparecidos.
En la provincia vecina de Hebei, donde unas 800.000 personas fueron evacuadas, nueve personas murieron y seis están desaparecidas por las lluvias.
A lo largo del fin de semana se informó de otras dos víctimas en la provincia de Liaoning.
Limpieza y rescate
Los medios estatales habían advertido la semana anterior que 130 millones de habitantes se verían afectados por estas precipitaciones extremas en el norte del país.
Algunas zonas en la periferia de Beijing y la provincia de Hebei todavía sufrían las consecuencias de las lluvias, con hasta 974.400 personas evacuadas, según los medios estatales.
Aun así, las autoridades capitalinas levantaron la alerta roja por inundaciones durante la mañana de este miércoles a medida que “el caudal en la mayoría de ríos había disminuido por debajo de la señal de alarma”, dijo la agencia de prensa estatal Xinhua.
Pasado el grueso de las precipitaciones, la atención se traslada al operativo de rescate para el que cientos de socorristas de la Cruz Roja fueron enviados a las zonas más afectadas para limpiar los destrozos y ayudar a las víctimas, informó Xinhua.
El presidente Xi Jinping pidió el martes “hacer todos los esfuerzos posibles” para evitar más muertos y rescatar a las personas “desaparecidas o atrapadas”.
De visita al distrito de Mentougou, uno de los más afectados en la capital, el viceprimer ministro Zhang Guoqing dijo que “la máxima prioridad del trabajo actual era salvar vidas, luchar contra el tiempo para encontrar a los desaparecidos o atrapados”.
China vive un año de fenómenos meteorológicos extremos, con fuertes tormentas y récords de temperatura este verano boreal. Los científicos dicen que el cambio climático aumenta la frecuencia e intensidad de estos eventos.
El país está en alerta ahora por la llegada del tifón, el sexto este año, que se acerca por la costa este.
FUENTE: Infobae