10 de abril de 2024
La competencia entre Novo Nordisk y Eli Lilly por el liderazgo en el mercado de medicamentos para bajar de peso se intensifica ante una demanda creciente y problemas de suministro.
Las drogas para adelgazar están en el punto de mira del mundo empresarial y médico. Novo Nordisk y Eli Lilly, líderes en este nicho, ven cómo sus ventas se disparan, al igual que su valor de mercado. Este interés creciente no solo beneficia a los fabricantes sino que plantea retos para competidores y sectores adyacentes, desde Weight Watchers hasta gigantes alimenticios como Nestlé, anticipando una transformación del mercado de golosinas.
Desde la introducción de Wegovy en 2021, el mercado ha experimentado un cambio drástico. La salida de Oprah Winfrey de Weight Watchers destaca el impacto directo sobre las empresas de bienestar y pérdida de peso. Las ventas de Wegovy ascendieron a $4500 millones en 2023, y se espera que Eli Lilly, con su recién lanzado Zepbound, genere $2900 millones. Este boom ha convertido a ambas empresas en titanes farmacéuticos, con valoraciones que superan los cientos de miles de millones de dólares.
Los fármacos GLP-1, al centro de esta revolución, ofrecen una esperanza para quienes luchan contra la obesidad, prometiendo pérdidas significativas de peso. Sin embargo, la producción enfrenta obstáculos, desde la escasez de componentes hasta desafíos logísticos en la fabricación de aplicadores.
El reto para estas empresas no termina en satisfacer la demanda actual. Ampliar el acceso a estos tratamientos, a menudo limitado por el costo y la cobertura de seguros, es fundamental para mantener su crecimiento. Además, la competencia se intensifica, con cerca de 100 candidatos a medicamentos para bajar de peso en desarrollo, lo que promete una carrera por la innovación y la eficacia.
En la carrera por dominar el mercado de medicamentos para bajar de peso, Novo Nordisk y Eli Lilly se enfrentan no solo entre sí sino a los desafíos de producción, regulación y una creciente competencia que busca desbancarlos. La promesa de estas drogas de transformar el tratamiento de la obesidad y otras enfermedades crónicas coloca a ambas compañías en la vanguardia de una revolución médica y económica.