El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha expresado su intención de enviar una nueva misión de expertos a China para investigar a fondo el origen del COVID-19, haciendo un llamado por «pleno acceso» a los detalles pertinentes, en una entrevista con Financial Times. Esta medida se impulsa con el objetivo de prevenir futuras pandemias entendiendo completamente cómo comenzó esta.
El líder de la OMS enfatizó que, aunque existen teorías predominantes —una que apunta a una transmisión zoonótica y otra que sugiere una fuga de laboratorio—, no se ha llegado a un consenso científico. La insistencia por respuestas más definitivas resalta una preocupación crítica y constante sobre las transparencias internacionales y las responsabilidades de los países para colaborar en esfuerzos globales significativos.
Ghebreyesus sostuvo que todas las hipótesis están «sobre la mesa» y subrayó la moralidad y la necesidad científica de entender claramente el origen del virus para evitar crisis similares en el futuro. Aunque aludió a una creencia de que las respuestas se revelarán con el tiempo, su reiterada solicitud de datos adicionales de China señala una presión creciente hacia una transparencia más significativa.
El director también resaltó que el impacto devastador de la pandemia ha fomentado una mayor valoración de los sistemas sanitarios robustos, marcando una tendencia en el reconocimiento global de la salud como una inversión esencial más que como un gasto.
En el contexto más amplio de la gestión de la pandemia, se observó que, a pesar del control más firme sobre el virus gracias a las intervenciones médicas y las vacunas, persiste la necesidad de vigilancia debido a emergentes variantes, señalando una evolución en la estrategia de respuesta global de una fase aguda a una de vigilancia y preparación sostenida.
Con una Asamblea General de la ONU en el horizonte, donde los líderes mundiales discutirán la preparación para pandemias a un nivel elevado, las declaraciones de Ghebreyesus pueden estar señalando una agenda de discusión que se centrará significativamente en la prevención futura a través de la comprensión del pasado, poniendo una luz sobre la necesidad de una colaboración internacional sin precedentes y transparente para navegar en los desafíos emergentes en salud global.
El régimen de Xi Jinping, que ha sido objeto de críticas por su falta de transparencia y cooperación hasta el momento, se encuentra ahora frente a un llamado renovado y vigorizado para facilitar una comprensión más profunda de los orígenes del virus, potencialmente estableciendo un precedente para la futura diplomacia sanitaria y las normas globales de responsabilidad y cooperación.