En el contexto político actual de Argentina, Javier Milei surge como una figura prominente tras las PASO, adoptando el concepto de «democracia plebiscitaria» que antes estaba asociado a Carlos Menem. Este mecanismo político se utiliza para hacer frente a la oposición y avanzar con proyectos a contracorriente. Milei, con una apariencia que recuerda a Menem, intenta establecer similitudes con él, a quien considera «el mejor presidente de la historia argentina».
El economista Alberto Benegas Lynch hijo, una figura central del liberalismo argentino, ha influenciado a ambos políticos. Lynch ha sido un promotor activo del liberalismo económico durante la mayor parte de su vida y jugó un papel crucial en la formación de alianzas políticas durante la era de Menem. Ahora, Milei lo reconoce como una inspiración.
Actualmente, Milei promueve tres proyectos principales: la dolarización de la economía, la reforma laboral y la anulación de la Ley de Aborto. Este último punto ha generado controversia y se espera que Milei impulse un plebiscito para respaldar su postura contra el aborto.
Las relaciones políticas también juegan un papel importante en este escenario. Después de las PASO, se han producido encuentros virtuales entre Milei y el ex presidente Mauricio Macri, generando expectativas sobre una posible alianza. Sin embargo, Patricia Bullrich, otra figura política de relevancia y candidata de Juntos por el Cambio, ha expresado su malestar con esta relación, intentando distanciarse de Milei.
Con las elecciones presidenciales acercándose, el panorama político está cargado de tensiones y estrategias. La influencia de Milei y su adopción de la «democracia plebiscitaria» pueden tener un impacto significativo en el rumbo político de Argentina.