24 de abril de 2024 – En medio de un clima de descontento por los recortes presupuestarios, la Universidad de Buenos Aires (UBA) enfrenta críticas por irregularidades en su gestión interna y desafíos que afectan directamente a los estudiantes.
Aunque la sociedad y los manifestantes coinciden en la necesidad de financiamiento adecuado, también demandan mayor transparencia y control en el manejo de recursos. La Auditoría General de la Nación (AGN) y la Sindicatura General de la Nación (Sigen) han realizado pocas intervenciones en la última década, limitando su participación a convenios específicos o planes anuales. La última auditoría reportada por la AGN se centró en la facultad de Psicología y reveló problemas significativos que persisten sin resolución efectiva.
Los informes internos de la UBA, accesibles solo parcialmente en su sitio web debido a errores técnicos, exponen una serie de falencias en la gestión de recursos y la seguridad académica. Las auditorías internas destacan la falta de procedimientos administrativos claros para el manejo de fondos propios y señalan serias deficiencias en la seguridad de los documentos estudiantiles, incluyendo legajos y diplomas.
Además, se observan problemas recurrentes en las compras y contrataciones de la universidad, con gastos no justificados y la falta de documentación adecuada para respaldar las transacciones financieras. Estas irregularidades son especialmente preocupantes para los estudiantes, quienes son los más afectados por la ineficiencia administrativa y la falta de recursos adecuados para su formación.
Extracto: «La Universidad de Buenos Aires, uno de los bastiones educativos más importantes de Argentina, enfrenta un escrutinio riguroso por parte de su comunidad y la sociedad en general. Las demandas de transparencia y mejora en la gestión financiera se hacen eco en un momento crítico para la educación pública del país.»