Más de 13.000 refugiados han huido de Nagorno Karabaj debido a la ofensiva militar de Azerbaiyán, según informaron las autoridades de Armenia. Este éxodo sigue a la victoriosa ofensiva de Azerbaiyán en este territorio separatista del Cáucaso. Además, se reportó una explosión en un depósito de combustible que dejó al menos 20 muertos y 280 heridos en medio de la crisis humanitaria.
En la ruta terrestre de escape, el corredor de Lachín, cientos de vehículos esperan cruzar hacia Armenia. Las autoridades de Ereván denunciaron planes de «limpieza étnica», lo que ha llevado a los civiles a huir, a pesar de las promesas del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, de garantizar los derechos de los armenios que permanezcan en el enclave.
La Unión Europea planea reunirse con representantes de Armenia y Azerbaiyán en Bruselas. Además, el primer ministro armenio y el presidente de Azerbaiyán se reunirán el 5 de octubre en Granada, España, con la participación de líderes europeos.
El éxodo de la población armenia de Nagorno Karabaj continúa, y las filas en la única ruta hacia Armenia son inmensas. Armenia se prepara para recibir hasta 40.000 refugiados, mientras que Rusia, que tenía una fuerte presencia en la región, rechaza las críticas de Armenia por haberlos abandonado durante el conflicto.