El presidente electo de Argentina, Javier Milei, y su vicepresidenta, Victoria Villarruel, han recibido un rosario bendecido enviado por el Papa Francisco. Este gesto del Sumo Pontífice llega tras una llamada telefónica en la que felicitó a Milei por su victoria electoral en el reciente balotaje frente a Sergio Massa.
La oficina de prensa de Milei confirmó la recepción del rosario bendecido, un símbolo de un nuevo comienzo en las relaciones entre el presidente electo y el Papa. Durante la campaña electoral, Milei había emitido comentarios críticos hacia el Papa Francisco, pero este reciente intercambio muestra un cambio de tono y una posible reconciliación.
La conversación telefónica entre Francisco y Milei, que duró aproximadamente ocho minutos, fue descrita como amena. El Papa instó a Milei a encarar su nueva responsabilidad con «sabiduría y coraje». A esto, Milei respondió afirmativamente, destacando su disposición para adquirir la sabiduría necesaria para su mandato. Además, durante la llamada, Milei invitó al Papa a visitar Argentina, a lo que Francisco respondió que lo consideraría.
Estos eventos marcan un giro significativo, teniendo en cuenta las declaraciones anteriores de Milei sobre el Papa. En entrevistas previas, el presidente electo había criticado duramente al líder de la Iglesia Católica, acusándolo de tener afinidades con regímenes comunistas y dictaduras como las de Castro y Maduro. Sus comentarios apuntaban a una postura de desacuerdo con las políticas y opiniones del Papa, especialmente en lo que respecta a la justicia social y la política.
Este gesto de acercamiento del Papa Francisco hacia Milei y Villarruel sugiere una apertura al diálogo y una voluntad de establecer una relación más constructiva con la nueva administración argentina.