El segundo tiempo dejó en claro que los niveles tan desparejos entre Argentina y Bolivia no lo equiparan ni la tremenda altura. El local intentó con faltas y pierna fuerte tratar de sacar a la Selección del partido, pero este grupo campeón del mundo tiene objetivos claros. Seguir haciendo historia, ganar y ganar. Y que, aunque parezca poco creíble, nadie extrañó al mejor de la historia, que se sentó en el banco y que disfrutó tanto como cada uno de los argentinos.
La Scaloneta dio un nuevo examen difícil y se sacó un muy bien diez, felicitado. Pero esta vez sin tener a Lionel Messi en el campo de juego. Eso habla de un crecimiento exponencial de un montón de jóvenes jugadores -Cuti, Enzo, Mac Allister, De Paul y Julián- y también de cómo dos viejos gladiadores como Otamendi y Di María pueden ser muy importantes en este tipo de batallas. Y se dio el tiempo para el tercero de Nico González, luego de una recuperación alta del ingresado Exequiel Palacios
Argentina hizo historia en La Paz, ganó por segunda vez seguida en tierra boliviana y en esta excelente actuación se dio un hecho increíble: el debut oficial de Alejandro Garnacho y que otro 10, llevara la 10 de Leo. Una actuación para el recuerdo que fue tan maravillosa, que el 3-0 se quedó corto.
fuente: Olé