En una sesión especial del Consejo de Seguridad de la ONU centrada en la situación de Ucrania, hubo tensos intercambios verbales. El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, que intervendrá en la sesión, enfrentará por primera vez a funcionarios rusos desde la invasión de su país. Viajó a Nueva York tras un emotivo discurso en la Asamblea General de la ONU donde llamó al mundo a mantenerse firme contra Rusia y describió las acciones de este país como un “genocidio”.
El embajador ruso ante las Naciones Unidas, Vasily Nebenzya, cuestionó la invitación extendida a Zelensky y por qué hablaría antes que los miembros permanentes del Consejo. En respuesta, el primer ministro de Albania, país que preside el Consejo, Edi Rama, instó a Rusia a detener la guerra si no querían escuchar a Zelensky.
Se destacó el dramatismo de la situación y se espera que sea un encuentro diplomático directo y significativo entre Ucrania y Rusia desde el inicio del conflicto en 2022. Zelensky resaltó que la comunidad internacional tiene una oportunidad histórica de poner fin a la agresión rusa bajo los términos de la nación atacada, haciendo referencia a los recursos energéticos y alimenticios utilizados por Rusia como armas en la guerra. También se citaron preocupaciones y advertencias de líderes globales, incluyendo a Joe Biden y Olaf Scholz, quienes subrayaron la necesidad de una resistencia unificada contra las agresiones de Rusia.
El encuentro es visto como una oportunidad crucial para avanzar hacia una solución, aunque existe una crítica sustancial por parte de algunos países en desarrollo sobre el nivel de ayuda militar proporcionada a Ucrania, señalando la desproporción en el apoyo para abordar otras crisis humanitarias globales.