La quita de recursos del Gobierno a las provincias amenaza con un paro nacional docente y pone en jaque el comienzo del ciclo lectivo.
El comienzo del ciclo lectivo 2024 se encuentra en peligro en la mayoría de las provincias argentinas, tras el anuncio del Gobierno nacional de cesar el envío de fondos destinados al Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y otros recursos cruciales. Este recorte ha exacerbado las tensiones entre la administración del presidente Javier Milei y los gobernadores, en un contexto donde las negociaciones salariales docentes se ven seriamente comprometidas.
Hasta el momento, solo cuatro de los 24 distritos han logrado garantizar el inicio de clases, mientras que en el resto del país la incertidumbre reina, especialmente en Tierra del Fuego, Chaco, Chubut y Santa Fe. Las conversaciones a nivel nacional entre la Casa Rosada y los sindicatos docentes de alcance nacional se mantienen estancadas, con la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) al frente de las demandas por una solución integral que incluya el envío de los fondos y la convocatoria a una paritaria nacional.
El Gobierno, por su parte, prepara un decreto con la intención de neutralizar un eventual paro, en un esfuerzo por descomprimir la situación. Sin embargo, la decisión de centralizar las negociaciones salariales en las autoridades locales, sin el apoyo financiero previo del Fonid, complica las posibilidades de un acuerdo satisfactorio para las partes involucradas.
La Ctera ha advertido que sin una respuesta favorable del Gobierno nacional, las clases no iniciarán como estaba previsto. La potencial oficialización de un paro nacional agudizaría aún más el conflicto, afectando directamente a millones de estudiantes que esperan retomar su educación en marzo.
El panorama en las provincias varía, con algunas, como la Ciudad de Buenos Aires y Mendoza, logrando acuerdos salariales preliminares, mientras que otras, como Santa Fe y Chubut, enfrentan un futuro más incierto. El foco del conflicto se centra en la distribución equitativa de los recursos, la actualización salarial acorde a la inflación y la garantía de condiciones dignas tanto para los docentes como para los estudiantes.
Extracto: La tensión entre el Gobierno y los gremios docentes pone en riesgo el inicio del ciclo lectivo 2024, con posibles paros y reclamos que afectarían a la educación a nivel nacional.
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