Las fuertes lluvias que azotaron Corrientes durante la madrugada del domingo han dejado un panorama desolador, con árboles caídos, muros derribados, techos volados, cortes de energía, y numerosas zonas anegadas, algunas hasta superar la altura de un automóvil. Ante esta emergencia, equipos de los Escuadrones 48 “Corrientes” y 47 “Ituzaingó” de la Gendarmería Nacional han intervenido para brindar asistencia a los damnificados, realizando patrullajes en áreas inaccesibles para vehículos convencionales.
Este esfuerzo conjunto ha permitido asistir a una ambulancia que transportaba a una mujer en trabajo de parto y que quedó varada debido a la acumulación de agua. Además, se llevó a cabo la evacuación de personas mayores y se brindó apoyo para evacuar a más de 80 familias de distintos barrios afectados por el colapso del sistema de desagües.
La Municipalidad de Corrientes ha descrito los hechos como “la peor catástrofe natural desde que existen registros oficiales”, lo que ha llevado a la suspensión de las clases y a la interrupción de servicios básicos como el transporte público y el suministro eléctrico. Además, se han reportado actos de vandalismo, incluyendo el saqueo de una farmacia.
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